17 octubre 2013

LA CARTA

Imagino…pero la PC no reproduce ni asomos del sonido de la máquina de escribir, esa bendición que me llegara en la infancia como regalo de mi madre, que muerde incesante para atrapar a veces escasos, otras, livianos y ágiles pensamientos, alguno,  que valga la pena tener compasión y escapar del olvido de este mundo que seguro Alfredo lo imaginaste.
Todo aquí se reconstruye célula a célula con gesto sencillo si lo vieras, caminar unos pasos en silencio y preparar unos mates con toda esa espuma del amanecer en la selva, ese virginal cosmos, donde la creación de los pájaros es anterior a la de los dioses… y de ahí el mundo, en su humedad que reproduce mi mano y la de los Compañeros, acaso no estás ahí, en esa tibieza simple, de esos besos al aire recordando las banderas, en esos abrazos purificadores de distancia.
Desde aquí entonces, un esperma de gorjeo mínimo sale a copular a un mundo ancho, ajeno, inútil, absurdo  de tanto nada… emprende el viajecito cómplice tropezando en el patio con gorriones, una veintena de ellos que me han adaptado en los últimos años, y que como viejos amigos me han invitado con migas de pan para mí y para mis hijos en esas épocas cercanas cuando los buitres no dejaron nada… que dignidad en estos plumones verdegrisesmarrones y en sus cantos carentes de la angustia y la cobardía… como misión para que el amor venza como siempre en todas las contiendas, entonces Alfredo, te presumo ente la tímida lámpara que nubla y empaña los cristales de tus lentes, esos ojos que eran para el mundo… y que ahora es una antorcha para nosotros…
Que somos nosotros Alfredo?... esa voluntad, esa nostalgia, esa clave para descubrir  en tus fórmulas químicas ese germen vital para este tiempo…reviso tus papales y tus fotos las menos tratando de tocar ese mensaje cifrado para los propios, fórmulas para el alma, para conmover, para no aflojar en esas noches prolongadas de las tormentas y las soledades, película perfecta de la globalización del capitalismo… si nos quieren ver reunidos en tu nombre en un Mc Donalds, me gusta entonces imaginar tu sonrisa cuando te cuento de ello, mientras sé que estarás pensando enviar al fin esa carta, que traerá al fin el correo, y que nos reunirá en círculo para escucharte hablar, así, para todos… palabras como migas de pan…para todos…
Entonces, sumamos colores y pinceles de Carlitos, si lo vieras Alfredo, se va sacando la tierra roja de las manos de la labranza y se prende a los pinceles y al carbón, no cabe dudas que arrancamos con el rojo siempre, amarillo, verde, paleta americana de colibríes y ceibos… recuerdo una vez en Alem te hizo un rostro de tigre detenido ante el espejo de un manantial, deteniendo al reloj y al paso del tiempo, Sí un tigre en la selva al caer la tarde bramando para darle miedo a las nostalgias y al llanto, es que nosotros no podemos, no debemos… el manantial que nos corre por dentro desde la cuna nos hace garras y dientes afilados para la poesía, para dar la bienvenida a los hombres y mujeres del sinmiedo.
Y de regreso por esas rutas de Misiones con Pirito, viste que a mí no me gusta parar, pero bueno… nos quedamos al costado del camino como para orinar (esas distracciones del hombre), una noche increíble de estrellas, y en ese silencio el agua rompía las piedras en vertientes finas y brillantes, una maravilla, líneas brillantes como caídas del cielo, recortadas sobre esas paredes oscuras de las piedras de la tortura, que ahora mientras recuerdo y lo escribo, le busco un disco de guitarras.
El sudor de Adolfo, el pecho en Asma de Quincho, el mechón en la frente de Samuel, la pregunta de Meli y de Zuny por mis hijos, me lleno de felicidad, sabernos más que le útero inicial, ahora somos la América compañera en esos gestos, despidiendo a un compañero con en las últimas horas, nos hace más humanos y más fuertes…Luisito!!! Alfredo!!! … otra Batalla ganada por pequeños héroes…
y el silencio del mediodía achica todas las sombras en uno, ofreciendo un plato de comida para el otro, para el que viene, para el que todavía no puede… me dice mi madre en esos olores, esos que son nuestros, esas copas encendidas bajo la parra de la Meli, Alfredo si nos vieras aguardando por el cartero…
y suena el timbre, abrimos esa carta…Alfredo!!! Con la abuela hamacándose en el patio rodeados de pájaros y nietos todos inventados, que importa!!! Si esta es nuestra victoria!!
Y entonces la FÓRMULA: algunas palabras simples en nombre de los Compañeros que viven en nosotros ahora y siempre, unos acordes en guitarra, ver que dicen las palabras en las constelaciones del cielo americano, un toque de humedad de la selva hermana, madre y compañera del guerrillero…
Y la poesía, la compañera ausente en la boca del pueblo… si no es de él, no habrá poetas…
PERMISO ENTONCES PARA QUE EMERJA, libre… sin ataduras… como un esperma cómplice que viene hace treinta años tratando de fecundarnos… corramos tras ella!!!! Por ahí buscando pueblos, mezclado entre gorriones y migas de pan COMPAÑEROS!!!


17 de Octubre – Día de la Lealtad de los Pueblos y los Compañeros.